martes, 14 de diciembre de 2010

La inseguridad...


Hoy tocaré ese tema....la inseguridad, creo que es natural y en mi caso muy obvia, ya que la balanza se inclinó por una chica mucho más entretenida y joven que yo, además de las múltiples virtudes que debe tener... Y ante eso aunque luche mil años es imposible ganar.


Pero hay otra parte de la inseguridad y es eso que te hace pensar...¿tendré posibilidades de volver a amar? o más que eso, ¿alguien se fijará en mí ? ¿ tendré la posibilidad de ser amada, de provocar un sentimiento y que sea sincero, que no me teman, que no se arrepientan a medio camino?


Está complicada la cosa, el otro día conversaba con mi amiga Carito y curiosamente las 2 hemos tenido 3 relaciones fuertes, intensas que nos han marcado y llegamos a la conclusión de que después de vivir todo eso, ¿qué más queda? En mi caso se complica mucho más por un asunto de edades, Carito está en los treinta y ... yo, ya pasé los cuarenta, y aunque varias amigas me digan que no se nota, que no importan... la realidad es que ya a los 42 no crees en ese amor devastador, en esas pasiones volcánicas, en esas noches increíbles en las cuales solo te guía el instinto para hacer feliz a la persona que comparte tu cama. Todo eso comienza a disfrazarse de inseguridad, de comodidad, de conformidad...


Creo que después de mi última y fallida relación también da para preguntarse... ¿En qué tan grave fallé ? Fui tan maldita que ni siquiera cabe la confianza en que cambié, o sea, ¿una es capaz de hacer tanto daño que simplemente no quedan ventanas, puertas ni rendijas por donde filtrar un sentimiento puro y nuevo?


La verdad puede ser que hay personas que no creen en los cambios y eso es respetable, también es válido que simplemente no te quieren y ni les interesa arriesgarse a una mirada, cosa también válida y puede ser que sencilla y derechamente hay seres que en esta vida no podemos estar acompañados y debemos vivir de los recuerdos de lo que algún día tuvimos... seguir soñando y tratar de vivir de la mejor manera posible, pero solos...

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