He vuelto a sentir ganas de escribir, quizás motivada por una interesante calabaza que anda saltando de blog en blog o quizás simplemente, porque me gusta desahogar mi interior en esta pantalla.
Mención aparte, me doy cuenta de que me gusta usar los "lo" como género neutro, quizás sea un referente emocional, no lo sé...
Bueno, volviendo al título de mi escrito de esta tarde... Pensé en lo que me rodea, en mi normalidad, en mi vida diaria, motivada por un simple comentario de una colega. No me molestó ni nada así, pero me dijo: "Nosotros los normales", refiriéndose a su condición de mayoría heterosexual... No haré un análisis profundo de ese grado de normalidad, ni tampoco me las daré de mártir del mundo lésbico, pero sí me causa gracia ser a estas alturas de la vida, considerada "anormal"... Cosa que me hace pensar y asegurar una vez más que gente bruta e inculta hay en todos lados, que este país que se las da de tan moderno, tiene una sola cáscara y que por dentro lo malo sigue avanzando como una lepra silenciosa y envolvente. Pero lo más interesante es que me encanta ser "anormal"... jajaja, no me molesté ni en rebatirle, ni en decirle que era una ignorante al incluirse en una clasificación y obviamente excluirme de ella... lo que me dio gusto fue la reacción de otras y otros colegas, quienes la miraron con cara de... y una, que ahora adoro, le dijo: "Hazte ver..." jajajajaja.
Me imagino que a muchas "anormales" como yo les pasan cosas parecidas o quizás peores, pero qué diablos...siempre he sido una rebelde y si pertenezco a una minoría se me hace más entretenido que pasen cosas como éstas en nuestra cotidianidad...
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