He vuelto después de un fin de semana genial. Ella, la dragona me abrazó con su calor, me dio sus besos ricos, me hizo cariño, limpió el arañazo que sin querer había hecho. Puedo contar también que se portó genial, que como algo natural me pidió que la acompañara a ver a su mamá, así que de paso conocí a los papás dragones...jajaja, situación aparte, la mamá dragona aludió a la ex de la Dragona y eso fue un momento chistoso, de esos freaks que quedarán para el recuerdo... jajaj.
Después fuimos a cenar algo exquisito, fue una cena genial, buena conversa, buena comida y una excelente compañía...sé que es difícil de creer, pero cuando estamos solas conversamos muchísimo. Somos muy relajadas, reímos mucho, nos miramos y podemos sacar de la nada tema de conversación. De ahí caminamos un rato por ese frío Santiago que es su tierra, su dominio desde que era una pequeña dragoncita. Después nos fuimos a regalonear a... , patudamente lo escribiré, nuestro refugio, su departamento, que se ha convertido en nuestro lugar de cariños, de protección, de ver tele abrazadas y yo quedarme hasta el lunes en la mañana, robándole tiempo a la rutina diaria, robándole el tiempo a la realidad de estar en distintas ciudades y tener distintas rutinas laborales.
Entonces...qué más digo por hoy... simplemente que gracias a esta Dragona linda, de ojos asombrados, sonrisa misteriosa... Santiago, ya no es esa ciudad que me dañaba con sus recuerdos, que ya no miro a la torre Entel con pena, ni camino por algunas calles del centro llena de arrepentimiento por los daños que puedo haber hecho, que ya no espero encontrar en alguna esquina a esa mujer que tanto se burló de mis sentimientos.
Ayer se lo dije a la Dragona, puede que nada resulte, puede que sea la atracción de este momento de nuestras vidas, puede que caigamos rendidas ante sentimientos tan fuertes que solamente nos quede mirarnos y decidir en silencio y complicidad seguir adelante...el futuro es tan incierto, pero lo que nunca olvidaré de ella... es su sinceridad, su simple y directa forma de ser... a veces me araña con las garras de dragona, pero sé que es por accidente, no es como tantas otras que de verdad han sido malas...ella es simplemente directa y pura...y eso en estos tiempos se valora y se agradece...
PS: "el tiempo no se nos va a acabar"... increíble...esa canción ya no duele. Al contrario... quiero el tiempo para nosotras...una Dragona y un Sueño.